Última novela que Chatwin completó en su lecho enfermo, cuando el sida le
había quitado gran parte de sus fuerzas. Si bien tuvo tiempo de introducir
correcciones en el primer manuscrito, la enfermedad le impidió pulir cuanto
deseaba esta obra que, en cierto modo, es un autorretrato en negativo.
Última novela que Chatwin completó en su lecho enfermo, cuando el sida le
había quitado gran parte de sus fuerzas. Si bien tuvo tiempo de introducir
correcciones en el primer manuscrito, la enfermedad le impidió pulir cuanto
deseaba esta obra que, en cierto modo, es un autorretrato en negativo.