Más información sobre el libro
Como si se tratara de un exorcismo, un viejo pintor recuerda ante su hija la figura de su esposa, ya fallecida. El relato se enmarca en los acontecimientos del verano y otoño de 1975, momento convulsionado por los avatares de una España en plena transformación. Pero la imagen de Ana, señora de rojo sobre el fondo gris de la vida cotidiana, permanece inalterable como eterno objeto de una pasión tan humana como artística.
Métodos de pago
Nos falta tu reseña aquí