Eva Baltasar escribe con poder poético y profundidad filosófica. Sus obras exploran complejas relaciones humanas y los mundos interiores de los personajes con una sensibilidad excepcional. Baltasar no teme abordar temas de dolor y vulnerabilidad, pero siempre los eleva con esperanza y el descubrimiento de la belleza en lo cotidiano. Su estilo es sugerente y evocador, atrayendo a los lectores a una experiencia introspectiva y cargada de emoción.
En "Mamut", la protagonista es una chica arcaica en la vida moderna que anhela ser madre, enfrentándose a su instinto de cazador solitario. Al abandonar la ciudad por un entorno aislado, experimenta una transformación profunda. Esta novela aborda las heridas de la sociedad contemporánea con una narrativa intensa y provocadora.
En "Boulder", la protagonista es cocinera en un barco mercante, disfrutando de la soledad y la libertad del mar. Sin embargo, su vida cambia al involucrarse en la maternidad y la educación de un hijo tras conocer a una mujer en Patagonia. Esta novela explora la identidad y el cambio a través de la voz de tres mujeres.
El permafrost es esa capa de la tierra permanentemente congelada y es también la membrana que cubre a la protagonista de esta novela. Escrita en primera persona, nos presenta a una mujer en etapa de formación que se protege del exterior, que percibe la superficialidad en todo cuanto la rodea y huye de un entorno que nada tiene que ver con su manera de entender la vida: una madre obsesionada con la salud, omnipresente y controladora, y una hermana que afronta su existencia convencional con medicación y un positivismo irritante. La protagonista, que siente pulsiones suicidas, no permite que nadie se le acerque demasiado, pero al mismo tiempo se entrega con intensidad al sexo con otras mujeres, la literatura y el arte. El pulso entre el hedonismo, los placeres más carnales y la muerte es constante en esta novela, así como el tono mordaz de una protagonista que nos gana con su inteligencia y su humor negrísimo desde la primera página.Repleto de imágenes poéticas, contundentes y muy físicas, este carácter tan palpable del texto no es gratuito en una novela que nos habla del cuerpo, del sexo, del yo; una obra aguda y directa que reivindica la libertad femenina en el placer y en la soledad.Eva Baltasar inicia con "Permafrost" un tríptico de protagonistas femeninas que quiere explorar distintas etapas en la vida de las mujeres.