Michael Strunge es uno de los poetas daneses más destacados de los años 80. Durante sus breves 27 años de vida, publicó 11 colecciones de poesía que surgieron de su mente poética febril. Su poesía tiene una energía que puede sacudir a cualquier lector pasivo, alternando entre una crudeza inmediata y tangible y una cualidad onírica que cautiva por completo. La escena punk de los 80, con su música y estética distintivas, fue una profunda influencia, evidente desde su debut e incluso en sus posteriores declaraciones de abandono del punk. Los temas de Strunge a menudo abordan la mortalidad, la impotencia, la alienación urbana y la autoaniquilación, pero también exploran los vibrantes contrapuntos de la vida, la embriaguez, la autenticidad de la ciudad y la autoglorificación, sin mencionar el amor. Se distanció conscientemente de la poesía cargada de política de los años 70, eligiendo en su lugar poetizar las propias condiciones de la vida.
Strunge was one of the early voices of a poetic movement in Denmark known as the ‘Poetry of the 80s’. Recognised as a rebellious, angry poet who identified strongly with the poor and the socially sidelined, he was convinced of the power of language to effect change, seeing the poet as both creator and messenger. Despite his suicide in the mid-80s, he is still highly regarded as a poet of the modernist era.