Ana Maria Machado Orden de los libros
Ana Maria Machado es una figura central en la literatura infantil brasileña, reconocida por su magistral combinación de sátira social y elementos fantásticos. Su escritura, imbuida de realismo mágico, presenta un manejo lúdico del lenguaje y estructuras narrativas que a menudo subvierten las convenciones tradicionales del cuento. A través de narrativas humorísticas y lenguaje simbólico, Machado transmite delicadamente mensajes sobre la libertad, los derechos humanos y la importancia de la coexistencia. Sus obras expanden la noción de espacio y tiempo, entrelazando a la perfección la realidad y la fantasía para explorar las conexiones invisibles entre generaciones.
- 2014
- 2008
Enrique e Isabel empiezan a ir al cole. Alli empiezan a hacer amigos, a jugar, cantar y aprender a leer. A su abuela le encantaria ver lo que hacen sin ser vista, pero como no puede, les espera todas las tardes para jugar.
- 2008
Juan es un niño que ha comenzado el colegio. Ya no puede jugar tanto con sus amigos como quisiera y lo siente mucho. Su madre le acompaña a la escuela cada día y, a medida que pasa la semana el niño comprobará que el camino a la escuela se convierte en una diversión. Una desenfadada historia en la que se demuestra que a través del juego se pueden superar todas las dificultades.
- 2004
Día de lluvia - 3ª edición
- 24 páginas
- 1 hora de lectura
- 2002
La abuelita aventurera
- 68 páginas
- 3 horas de lectura
Una simpática abuelita se muere de ganas de viajar. Pero como no tiene dinero, decide fabricarse un globo enorme. Después de unos días de trabajo, el globo está listo para echar a volar. Sin embargo, distintos animales le piden ir con ella... ¿Qué peripecias ocurrirán en un viaje tan peculiar? Un divertido libro que muestra la fuerza de la imaginación y la unión del grupo.
- 2000
Pedro tiene un compañero de clase muy especial: tiene cuernos, vuela y es completamente negro con flores de colores bordadas... Su familia cree que se trata de una broma o de algo que se ha inventado. Hasta su abuela pone mala cara cuando le oye contar ciertas cosas.
