Tras el auge del romanticismo en Inglaterra, el misterio cae como la niebla sobre las calles de la mítica Albión. Proliferan novelas en las que los fantasmas se apoderan dl alma de los vivos hasta la obsesión, las vidas marcadas pro destinos infaustos, los personajes lejanos que buscan la inmortalidad y ganan por amor... al mismo diablo. No es sino el manierismo del gusto romántico por las novelas de misterio, por el amor a los parajes desconocidos y llenos de historia y ruinas. Pero Drácula, pese a beber de esta tradición y esta corriente, es mucho más que una novela gótica. Drácula, encarnación viviente de las fuerzas del mal, se apodera del lector para hacer del vampiro un héroe. En Drácula el mito del vampiro, asombrósamente bien documentado de acuerdo a las tradiciones más oscuras y demoníacas, entabla una lucha a muerte contra el espíritu racional capaz de vencer a las fuerzas del mal. Realmente no es una casualidad que Bram Stoker, su autor, fuese miembro alternativamente de sociedades literarias y científicas. El darwinismo imponía en la época su racionalidad, los mitos caían ante la fuerza de la lógica y la capacidad del hombre por descubrir, y Stoker se enfrentó a un mito, Drácula, con la fuerza del hombre de su tiempo, encarnado en Van Helsing.
Nigel Warwick Libros


Robinson Crusoe
- 317 páginas
- 12 horas de lectura
A Daniel Defoe le cabe el raro honor de haber dado forma a uno de esos personajes literarios que se convierten en paradigmas de la condición humana. Si el Quijote encarna la fuerza paradójica de los ideales, si Ulises representa al hombre que se sobrepone al destino, y el capitán Nemo al rebelde enemistado con la sociedad, Robinson Crusoe es la expresión de la lucha del hombre por hacerse un lugar en el mundo [...] La sana reacción contra los excesos experimentales de los años sesenta y setenta y la irrupción de una literatura, sobre todo a partir de la publicación de Cien años de soledad, que vuelve a contar historias y a buscar la complicidad del lector, han permitido una revalorización de esos libros de aventuras con los que aprendimos a amar la lectura y que se han revelado no sólo como gratos entretenimientos sino también como sólidas obras literarias cuya influencia perdura hasta nuestros días. Ése es el caso [...] de las aventuras de Robinson Crusoe