Michaela DePrince
El camino de Michaela DePrince es de una profunda resiliencia, nacida en medio de la agitación de la guerra en Sierra Leona. Su pasión por el ballet se encendió a través de un encuentro casual con la imagen de una revista, lo que provocó su determinación de trascender las dificultades. Adoptada por una familia estadounidense que la apoyaba, perfeccionó sus habilidades, rompiendo las barreras de la belleza convencional y la raza en el exigente mundo de la danza. DePrince se ha convertido en una bailarina profesional, utilizando su historia para inspirar a los jóvenes a perseverar y perseguir sus sueños.