"Una nueva técnica de ganchillo explicada para niños ¿Ya sabes tejer a ganchillo? Pues ahora te presentamos algo nuevo: ¡Prueba con el knooking! Consiste en tejer a ganchillo con una aguja muy especial. El resultado que se consigue tiene el aspecto normal de un tejido. Es francamente fácil y se aprende en un abrir y cerrar de ojos con las fotografías y las sencillas instrucciones paso a paso.Con las piezas tejidas se podrán hacer muchas cosas: desde pulseras y fundas con corazones, hasta cojines con carita sonriente y mucho más."--Publisher's description
A primera vista las piedras pasan desapercibidas en los arroyos y estanques, en los bordes de los caminos o en tu propio jardín; los niños pueden recoger piedras de formas muy diversas por todos sitios: grandes o pequeñas, rugosas o lisas, con aristas o redondeadas, y en todas las tonalidades imaginables blancas, grises, negras o marrones . Además, en muchas de ellas aparecen dibujos muy interesantes. Si se miran con un poco más de atención y algo de fantasía, se pueden descubrir y sacar a la luz cosas increíbles: caras humanas, figuras completas de animales, torres puntiagudas, conchas de caracoles redondeadas, corazones, estrellas, enanos... Las piedras se pueden pintar o poner unas junto a otras para formar divertidas figuras, como orugas o peces. Bastan unos pocos materiales, por ejemplo unas cuentas de madera y unos trozos de cordel o alambre, para crear unos alegres personajes: peces curiosos, leones salvajes o simpáticos ratones. Existe gran cantidad de posibilidades para hacer diseños con piedras, lo que servirá de diversión a todos, tanto a mayores como a pequeños a partir de 5 años. Se pueden utilizar como juguetes, a modo de pisapapeles o para adornar la mesa, una vitrina, una estantería o el alféizar de la ventana; las piedras pintadas también pueden servir como un regalo muy especial para nuestros seres queridos.
Trabajar con papel maché es muy fácil, resulta barato y no perjudica al medio ambiente. A los niños les encanta hacer una pasta de papel maché con recortes de papel y engrudo, mezclarla, amasarla y probar a modelar divertidas formas. Las posibilidades son innumerables. Se comienza con formas sencillas, como por ejemplo una bola, que puede terminar convertida en una cabeza. Una capa fina de papel maché sirve para hacer letreros o colgantes. Con un poco de práctica se obtienen también formas de mayor complejidad. A objetos como globos, cuencos o pequeños cacharros se les puede dar otro aspecto adornándolos con papel maché. Botellas o tarrinas de yogur o postres sirven de base para la realización de otros objetos. Una vez secas y colocadas las diferentes piezas, éstas se pintan. Gracias a las innumerables posibilidades que ofrece el trabajar con papel maché no hay límites para la fantasía.
Ideas decorativas para Navidad. Originales calendarios de Adviento, decorativas coronas llenas de festivos adornos, rutilantes velas de mesa y preciosas decoraciones en las ventanas nos traen, como por arte de magia, el espíritu navideño y hacen nuestro hogar más acogedor. Se realizan rápidamente y con muy poco gasto. ¡Maravillosos detalles para la época más festiva del año!
Originales y creativos marcos de fotos. Fotos de niños enmarcadas con abalorios de colores o girasoles. La foto del ser querido decorada con corazones rojos y peluche. Una postal en un elegante marco de metal con teselas brillantes y adornos de alambre. Sencillos y fáciles de hacer. Ideas que se salen de lo corriente.
La porcelana pintada da un toque de frescura y alegría a la vida cotidiana. Al desayunar nos ponemos de buen humor usando unas tazas y platos de alegres colores. También elevan el ánimo los cuencos decorados con estrellas azules, corazones o lazos. En una vajilla decorada con motivos de verduras y frutas, la comida sabe mucho mejor. El tomar el té resulta un placer usando tazas y platos en los que brillan golosinas de alegres colores. Y qué divertido es lavarse los dientes usando un vaso en el que nadan peces y moluscos. El regalar un plato como recuerdo del nacimiento, bautizo o boda, o unos bonitos floreros con originales dibujos se recibe como un detalle muy especial. La técnica es muy simple, consiste en pintar directamente el objeto con pinturas para porcelana y, después de dejarla secar cuatro horas, meterlo en el horno durante 90 minutos a 160 °C.