Zezé, el protagonista de Vamos a calentar el sol, es un niño brasileño que de pequeño quería ser poeta y llevar corbata de lazo. Ha pasado algún tiempo desde cuando lo conocimos en Mi planta de naranja lima, se ha ido a estudiar a Natal, donde una familia lo ha acogido, y sólo piensa en aplicarse en el colegio para algún día poder ayudar a sus padres y hermanos. Aunque él crea que es un niño muy serio, en el fondo sigue siendo un travieso con un corazón de oro y una imaginación desbordante. Sus confidentes son el sapo Adán y sus dos héroes del celuloide: Maurice Chevalier y Tarzán. En ellos, y en un bondadoso profesor del colegio Santo Antônio, encontrará la fuerza que le falta para sobreponerse a la nostalgia y salir airoso –si es posible– de tanta travesura. Como ya hizo en Mi planta de naranja lima, José Mauro de Vasconcelos se basó en sus recuerdos de infancia y juventud para moldear esta tierna novela sobre la amistad, una de las más inolvidables historias de aprendizaje de la literatura brasileña del siglo XX.
José Mauro de Vasconcelos Orden de los libros
José Mauro de Vasconcelos fue un maestro en capturar complejas emociones humanas y experiencias vitales. Su escritura se nutre de profundas vivencias personales, explorando temas como la infancia, la resiliencia y los cambios abruptos de la vida con una empatía profunda. Vasconcelos era conocido por su proceso creativo poco convencional, sumergiéndose meticulosamente en los escenarios de sus historias para retratar vívidamente a sus personajes y sus mundos. Su legado literario reside en su cruda honestidad y su capacidad para conectar con los lectores a un nivel profundamente humano.






- 2014
- 1976
Esta novela es una de las más importantes obras de la nueva literatura brasileña. Su autor, nacido en Bangu, Río de Janeiro, en 1920, falleció en 1984. Ha vivido una existencia intensa y agitada: entrenador de diversos boxeadores, trabajador en una hacienda, pescador, maestro en la escuela primaria de una aldea pesquera, actor de cine y televisión y viajero infatigable. Muy elogiada por la crítica y calurosamente recibida por el público, Mi planta de naranja-lima, en páginas de gran colorido narrativo y extraordinaria fuerza, relata la historia de un niño que un día, de pronto, descubre el dolor y se hace adulto precozmente. Las ensoñaciones, la picardía, el sufrimiento y la ternura del protagonista, hacen que esta historia de vida atraiga al lector desde sus primeras páginas.