El juego de Gerald

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Gerald Burlingame, aficionado a los juegos eróticos, muere de un ataque al corazón mientras hacía el amor con su mujer, que permanecía atada a la cama. El problema es que se hallan en una cabaña aislada en la montaña, junto al lago Kashwakamak. Con el marido muerto sobre ella, la mujer tiene mucho en que pensar, empezando por los fantasmas que le persiguen desde que era una niña. Todo le recuerda a otra casa de veraneo, a otro lago y a otra historia que sucedió durante un eclipse del 20 de julio de 1963. Por si fuera poco, Jessie no está sola, lo que convierte su espera en una auténtica pesadilla.